El área infanto juvenil es la sección mas conocida por la población de la carrera de fonoaudiología. Es por ello que es importante profundizar en como el profesional logra una conexión con su paciente, permitiéndole crear un vinculo que afiance la terapia. El diagnóstico en niños no es una tarea fácil, requiere seguir una estructura establecida que facilita la comunicación entre el paciente y el fonoaudiólogo desde la primera visita.
En primer lugar el fonoaudiólogo debe determinar si existe o no un trastorno. Si se analiza el proceso de diagnóstico podemos distinguir que radican en el aspectos como la naturaleza y síntomas del problema; la etiología o causas que contribuyen al problema, si es posible; el pronóstico, la afirmación de cual puede esperarse que sea el resultado de tratamiento del problema, y las sugerencias apropiadas para la intervención que puedan proporcionarse a los profesionales y/o padres.
En la primera etapa de recolección de antecedentes, que se realiza por medio de la anamnesis, el fonoaudiólogo trata de recopilar la información mas relevante del paciente, como lo son los antecedentes peri natales y hereditarios, adquisición de hitos del desarrollo (en variados aspectos) y por último la comunicación en la vida cotidiana del niño.
En el desarrollo de la entrevista el profesional deberá observar al niño desde un punto vista clínico, para poder elaborar su hipótesis diagnóstica y luego orientar la evaluación propiamente tal, que es destinada a conocer el sistema comunicativo del niño.
El proceso para recopilar la información, debe ser único para cada paciente y debe ajustarse a las características de la situación y a las múltiples variables que intervienen en este proceso. Además cabe mencionar que la empatía de proceso completo de diagnóstico es fundamental para que este sea llevado acabo de la manera más correcta y agradable posible.
Las patologías más frecuentes en niños que visitan al fonoaudiólogo son los trastornos asociados del lenguaje y los trastornos específicos. Los trastornos asociados (o secundarios) son aquellos en que la alteración del lenguaje esta asociada a alguna patología de base, por el contrario los trastornos específicos del lenguaje se caracterizan por tener como síntoma principal la alteración de este.
Referencias:
Revista chilena de fonoaudiología
N° 4 / junio 2001
miércoles, 30 de junio de 2010
Objetivo del Diagnóstico del Fonoaudiólogo Infanto-Juvenil
Magíster en Trastornos de la Comunicación en Niños y Adolescentes
Hace no mucho tiempo el mencionado proyecto fue presentado a la Escuela de Postgrado de la Facultad de Medicina y actualmente se encuentra en la etapa de revisión y evaluación por expertos. En ese plano se espera que antes de fines de este año se pueda presentar en Consejo de Facultad e idealmente abrir vacantes a concurso durante el 2011 o al año siguiente ya que existe una fuerte demanda externa en cuanto a la oferta de un programa de magíster en el área de las dificultades del lenguaje infanto-juveniles, y como Universidad de Chile es nuestro fin satisfacer esa necesidad de la sociedad.
Para mayor información: www.med.uchile.cl
Trastornos del Lenguaje más comunes en niños
Trastorno Específico del Lenguaje
Anormal adquisición del lenguaje, a nivel comprensivo, expresivo o ambos. El problema puede afectar a uno, varios o a todos los niveles del lenguaje (fonológico, semántico, morfosintáctico, pragmático) y no está justificado por déficit auditivo, cognitivo, daño cerebral o trastorno emocional.
Disfasia
Es un trastorno severo de la adquisición del lenguaje, que se afecta la expresión y la comprensión del lenguaje.
En el aspecto expresivo se observan alteraciones fonológicas, morfosintácticas, semánticas y en el discurso.
En el aspecto comprensivo presenta déficit de severo a muy severo, afectando también la comprensión no verbal.
En el aspecto cognitivo predomina un déficit del procesamiento secuencial, déficit en la construcción de imagen mental, entre otros.
En el aspecto perceptivo se observa déficit en la discriminación de estímulos auditivos, déficit perceptivo en la frecuencia conversacional entre otras dificultades.
El aspecto psicomotor también está afectado, se observa menor coordinación motora, dificultades en la lateralización, etc.
En el aspecto conductual se podrían ver hiperactividad, desordenes emocionales, déficit atencional.
En el aspecto neurológico no hay una lesión en concreto, pero se cree que podría existir algún daño en la etapa pre y perinatal en estructuras cerebrales subcorticales.
Estos niños suelen tener problemas de procesamiento del lenguaje o de abstracción de la información significativa para el almacenamiento y recuperación por la memoria a corto plazo.
Trastorno Específico del Lenguaje (TEL)
El trastorno específico del lenguaje se considera como una patología evolutiva que se ha denominado por exclusión (Bishop, 1992), por lo que se eliminaron como factores causales los procedentes del daño cerebral, el retraso mental, de las limitaciones perceptivas y motoras, y de las condiciones socio ambientales negativas.
Estos trastornos afectan al 7,4% de los niños en edad escolar (Leonard, 1978). Aunque no existe una homogeneidad dentro de los síntomas que permita considerar al TEL como un conjunto bien delimitado de formas lingüísticas reconocibles. Esto implica una variabilidad en la sintomatología desde trastornos fonológicos hasta la ausencia del lenguaje y notables dificultades de comprensión.
En la actualidad algunos autores a partir de los datos acumulados, ponen en de manifiesto la distinción clínica entre los trastornos específicos expresivos y mixtos sería la mejor forma de describirlos (Evans Viele y Kass, 1997). Sin embargo, las investigaciones actuales no hacen diferencia de los subgrupos de TEL; y si lo hacen, solo se reduce a “expresivos” y “mixtos” o “comprensivo expresivos”. Más tarde se han diferenciado estas formas clínicas a través de los efectos repercusivos en el lenguaje, fundamentados en la gravedad o en el rango etario. Dentro de este contexto como aparecen las primeras clasificaciones.
Criterios de clasificación basados en la afectación
Ingram (1972, 1975) establece un criterio de clasificación basado en la gravedad del lenguaje: producción y comprensión. Perelló, Gruixá, Leal y Vendrell (1978) proponen otro criterio de clasificación en el que describen cuatro categorías:
Retardo simple del habla: se caracteriza en la ausencia de habla antes de los 18 meses de vida, reducción de los parámetros lingüísticos y por la incapacidad de atenerse a un tema definido. Puede mejorar con tratamiento.
Retardo puro del habla: se refiere al retraso puramente fonético.
Retardo simple del lenguaje: se centra en la homogeneidad de las dimensiones del lenguaje.
Disfasia: inicio tardío del habla con dificultad práxica y espaciales asociadas. Con audición normal.
Diferencias entre retraso lingüístico y disfasia
Además de las categorías antes dichas proponen la distinción entre los retrasos y la disfasia basándose en la ausencia de factores etiológicos distintos, o por compartir la definición por exclusión (Perelló y cols, 1978). Ambos trastornos se diferencian cualitativamente en las siguientes categorías:
Retraso del lenguaje: desfase cronológico en el desarrollo, considera el respeto de las etapas de adquisición y desarrollo. No afecta a la comprensión o la afecta de modo leve. Los sujetos afectados responden a una intervención positivamente y frecuentan mejoría.
Disfasia: trastorno en el mecanismo de la adquisición del lenguaje, se caracteriza por un inicio tardío, el que se asocia a un lenguaje anómalo. Aquí se ve un compromiso leve o grave de la comprensión con lentitud evolutiva. No responden con facilidad a las terapias.
Otra clasificación entregada bajo la perspectiva de los trastornos evolutivos divide estos en categorías que se basan en el compromiso del habla y del lenguaje tanto en retrasos como en la misma disfasia (Behares y Elizaicín, 1981).
Los retrasos se dividen en lingüísticos y referentes a la palabra.
En el caso de las disfasias, estas se dividen en expresivas (imposibilidad para codificar y producir un mensaje) y receptivas (donde no hay respuestas a estímulos no verbales).
Según el DSM-IV, en lo que se refiere al lenguaje, sus trastornos son clasificados en dos grandes grupos:
- Trastorno del lenguaje expresivo:
Se manifiesta clínicamente por un vocabulario limitado, errores en los tiempos verbales, dificultades en la memorización de palabras o dificultades en la producción de enunciados de longitud propias para el nivel del sujeto.
- Trastorno mixto del lenguaje receptivo-expresivo:
Las manifestaciones clínicas son similares a las del trastorno anteriormente mencionado, a las que hay que añadir dificultades para comprender palabras, frases o tipos específicos de palabras. Se pueden asociar también a este trastorno las dificultades que acompañan al trastorno del lenguaje expresivo.
Lo criterios usados para diagnosticar el TEL son; tomar en cuenta la discrepancia entre los resultados obtenidos por el niño examinado y la media de la población normal. Sin embargo no se considera esta discrepancia entre resultados de tests de lenguaje y de tests de inteligencia no verbal, debido a la constatación de su inestabilidad (Cole, Schwartz, Notari, Dale y Mills, 1995).
Algo importante de recordar es que los niños con TEL van obteniendo peores resultados en los tests de inteligencia no verbal conforme pasa el tiempo, a causa del deficiente papel del lenguaje como mediador cognitivo.
Bueno, existen muchos autores han desarrollado diferentes tipos de clasificaciones:
Por ejemplo las autoras Korkman y Häkkinen-Rihu (1994), seleccionaron una gran cantidad de pruebas de lenguaje y las clasificaciones resultantes fueron:
-Subtipo global; subtipo específico dispráxico; subtipo específico de comprensión y subtipo específico disnómico.
Existe otro tipo de clasificación que es según Rapin y Allen, que es la más utilizada hasta el día de hoy, clasifica los trastornos de la siguiente forma:
• Trastornos de la vertiente expresiva:
-Trastorno de la programación fonológica.
- Dispraxia verbal.
• Trastornos de comprensión y expresión:
-Trastorno fonológico-sintáctico.
- Agnosia auditivo-verbal
• Trastornos del proceso central de tratamiento y de la formulación:
-Trastorno léxico-sintáctico.
- Trastorno semántico-pragmático.
Y para finalizar, las clasificaciones según Conti-Ramsden (2000) :
• Trastorno expresivo del lenguaje:
• Subgrupo expresivo con implicación de la semántica y de la sintaxis.
• Trastorno expresivo-receptivo del lenguaje.
• Subgrupo fonológico-sintáctico.
• Subgrupo trastorno gramatical del lenguaje.
• Trastorno complejo del lenguaje.
• Subgrupo trastorno pragmático “puro” del lenguaje.
• Subgrupo trastorno pragmático “plus” del lenguaje.
lunes, 28 de junio de 2010
Perfil del fonoaudiólogo en Chile
El profesional fonoaudiólogo en el ámbito ético
Todo profesional ha de pertenecer a una comunidad en la cual se comparten saberes y quehaceres, constituida por todo un equipo multidisciplinario, en este caso, del área de la salud. Además, dicho profesional debe manejar un conjunto de conocimientos organizados e integrados, destrezas y una formación ética que le permitan responder a las necesidades sociales; esto implica, procurar mantener la dignidad y el bienestar físico, mental y social del individuo perteneciente a la comunidad.
En cuanto a la formación del profesional, es de vital importancia que el egresado además de sus destrezas y saberes integre en su quehacer la solidaridad, la responsabilidad social, el interés en la adquisición de conocimientos científicos y técnicos, la preparación para trabajo en equipo y la actitud de reflexiva y crítica frente a su propia labor. El fonoaudiólogo más allá de abordar del concepto biomédico tradicional debe ampliar su concepto a un tipo bio-sico-social, en el cual actúe como agente educador y promotor de la salud de la comunidad. Es decir, según Romero (citado en De Barbieri, 1999) debe promover la dignidad de las personas, el pleno desarrollo de sus potencialidades y su integración social contribuyendo al mejoramiento de la calidad de vida. Este comportamiento debe estar presente en todo profesional del ámbito de la salud, ya que según la OMS (1948) la salud se define como Un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de enfermedad o dolencia. Es por ello que el profesional fonoaudiólogo debe integrar en su formación las características y competencias que le permitan contribuir a satisfacer necesidades actuales vinculadas con la realidad social del momento, procurando siempre, desempeñarse de la manera más eficaz posible.
¿Qué hace el fonoaudiólogo en Chile?

El fonoaudiólogo que se desempeña en el área infanto-juvenil debe constituir un ejemplo como comunicador y para ello debe poseer indemnidad sensorial y condiciones anátomo-fisiológicas que le permitan un buen funcionamiento del aparato fonoarticulatorio y manejo apropiado del lenguaje lecto-escrito, entre otros. Adicionalmente debe desarrollar ampliamente su creatividad, iniciativa y flexibilidad para adaptarse a los distintos escenarios y pacientes con los que se enfrenta en su quehacer. El profesional de esta área es el que más se ha incorporado a la atención primaria en hospitales, clínicas y consultorios (a diferencia de las otras áreas de la disciplina que lo hacen principalmente en atención terciaria) debido a la alta frecuencia de trastornos de la comunicación en lactantes y preescolares. Además es importante destacar la imprescindible labor que estos profesionales realizan en escuelas especiales de lenguaje y unidades técnico pedagógicas donde brindan atención directa a los menores y asesoría técnica a los profesionales de los establecimientos educacionales.
Referencias
De Barbieri Z. Perfil Profesional del Fonoaudiólogo Chileno. Revista Chilena de Fonoaudiología (Chile). 1999; Volumen II (2): 5 – 11.
OMS: Organización Mundial de la Salud. Glosario de Promoción de la Salud: Sección I: Lista de términos básicos. [citado 27 junio 2010]. Disponible en: http://whqlibdoc.who.int/hq/1998/WHO_HPR_HEP_98.1_spa.pdf
Romero J. Rol del estado en salud en Transición a la democracia y salud Ed. CPU. Santiago, Chile 1992
domingo, 27 de junio de 2010
La conciencia fonológica en niños con Trastorno Específico del Lenguaje
El trastorno específico del lenguaje (TEL) es un problema de la comunicación oral muy frecuente en la población infantil. Este trastorno se define como una “disfunción específica o fracaso en el desarrollo normal de la expresión y/o comprensión del lenguaje, en ausencia de otras discapacidades que podrían considerarse como posibles causas, como déficit auditivo, deficiencia mental o trastorno psicótico” (Bishop, 1992). Los niños con TEL pueden presentar dificultades a nivel semántico, morfosintáctico, pragmático y fonológico, siendo este último el más frecuente y que se expresa básicamente en problemas con la elección de los fonemas constituyentes de una palabra, así como su colocación en secuencia. Además, los efectos del trastorno fonológico se pueden manifestar, por ejemplo, con un déficit en la conciencia fonológica en cuanto al inicio de la adquisición de la lecto escritura por parte del niño. Por lo tanto, las dificultades que pueden presentar los niños con TEL en la adquisición de la lecto escritura pueden explicarse postulando que existiría una relación directa entre las dificultades fonológicas en el lenguaje oral y el desarrollo de la conciencia fonológica.
¿Qué es conciencia fonológica?
Es un tipo de conocimiento metalingüístico o habilidad para centrar la atención sobre el lenguaje y reflexionar sobre su naturaleza, estructura y funciones. Apunta a la habilidad para identificar y manipular explícitamente las unidades fonológicas de la palabra hablada. Esta conciencia fonológica se basa en dos unidades: sílaba y fonema, esta última tiende a ser más difícil de asociar por los niños, ya que, a diferencia de la sílaba, el fonema no es producido naturalmente en forma aislada, lo que hace que para los infantes sea más arduo ser conscientes de su existencia.
¿Cómo sería la conciencia fonológica en niños con TEL?
Ante la premisa que señala que la conciencia fonológica es el conocimiento explícito y consciente del nivel fonológico que ya se maneja explícitamente, un niño con dificultades fonológicas en el lenguaje oral puede presentar problemas en el desarrollo de habilidades metafonológicas. Se plantea que el déficit de la conciencia fonológica podría ser un aspecto nuclear en los TEL. Por consiguiente, estos niños pueden verse perjudicados permanentemente, por ejemplo, en su rendimiento escolar en relación a sus compañeros sin TEL. Ortografía, deletreo, conciencia fonológica, conocimiento de sílabas y fonemas son algunos de los aspectos que tienen la posibilidad de verse notablemente mermados en niños con TEL.
¿Cómo se evalúa la conciencia fonológica?
Hay diversos puntos de vista y diferencias en cuanto a la evaluación de la conciencia fonológica, sin embargo, en términos generales deben considerarse los siguientes factores:
• La unidad fonológica de la palabra que se pretende evaluar: rima, sílaba o fonema.
• Las operaciones cognitivas implicadas, referidas principalmente a las de análisis (segmentación de las palabras en las distintas unidades fonológicas –fonemas, sílabas-) y síntesis (requiere la producción oral de una sílaba o palabra uniendo sus componentes que han sido escuchados en forma separada).
• La complejidad de las tareas, que pueden ser simples o complejas. Las tareas simples se relacionan con: reconocimiento de rimas, contar, identificar silabas y fonemas, etc. Mientras que las complejas se vinculan con: invertir, suprimir o agregar silabas y fonemas, entre otras.
La falta de conocimiento acerca del desarrollo de la conciencia fonológica en niños con TEL entorpece la posibilidad de generar programas de estimulación específicos, cuyos objetivos sean mejorar el rendimiento fonológico y preparar a los niños para el aprendizaje de la lecto-escritura.

Para estimular las habilidades metafonológicas se debe determinar lo siguiente:
• Unidad fonológica que se quiere trabajar.
• Tipo de tarea que el niño debe realizar
• Posición de la sílaba o el fonema dentro de la palabra
• Características del segmento
Esta estimulación, además, posee dos fases: una primera que tiene por objetivo la adquisición de la conciencia fonológica por parte del niño y una segunda fase en la cual el niño aplique su conocimiento con el fin de consolidarlo, alterarlo o repararlo.
En resumen, los niños con TEL pueden presentar problemas en la conciencia fonológica, desafiando a la clínica a buscar nuevas formas de evaluación para ellos. Esta situación es la causa principal de la creación de programas de estimulación temprana que abarquen íntegramente el trastorno fonológico, lo cual permitiría superar el déficit fonológico del lenguaje oral, asimismo con el aprendizaje de la lecto escritura.
Referencias
Bishop, DVM. The biological basis of specific language impairment. En C. Fletcher y D. Hall (Eds.) Specific speech and language disorders in children. Londres, 1992; AFASIC-Whurr, 2-17.
De Barbieri Z. Conciencia Fonológica en niños con trastorno específico del lenguaje. Revista Chilena de Fonoaudiología (Chile). 2002; Volumen III (3) N°1: 39 – 47.
sábado, 26 de junio de 2010
Estimulación temprana del lenguaje

El contenido, se origina producto de la experiencia vital que tiene el niño con las personas, objetos y eventos del mundo que lo rodea.
La forma, corresponde al modo como se estructura este sistema, en cuanto a sonidos, palabras y oraciones.
El uso, comprende todos los propósitos para los que se utiliza la comunicación.

Presentele sorpresivamente ante su mirada objetos sonoros y de colores vistosos.
Llamelo por su nombre.
Respondale con palabras y sonrisas a cualquier manifestación de expresión.
Repitale los sonidos que él logra emitir.
Hablele, repitiendo palabras sencillas como "mamá" o "papá", en forma pausada.
Animelo a que se saque el chupete de la boca.
Susurrele al oído la imitación de los sonidos que él emita y otras palabras distintas.
Conversele frecuentemente de las cosas que está mirando, con palabras sencillas y conocidas.
Hablele para que repita sonidos prolongados; por ejemplo: maa-paa-taa.
Has sonidos para que el niño los imite.
Incentivelo por medio de palabras y un compás de espera a que manifieste deseos de repetición.
Digale palabras conocidas, por ejemplo: ¿Dónde está el papá?, y espere que le conteste.
Repitale sílabas redobladas: " ma-má", "ta-ta", "pa-pá".
Haga sonidos de onomatopeyas.
Hablele con distintas expresiones.
Pasele objetos conocidos por él y nombreselos.
Intente enseñarle palabras como tía, mamá, etc.
Responda a sus intentos de comunicación.
Repitale constantemente sonidos que él emita.
Ponga énfasis en nombrar las acciones que él realiza; por ejemplo: "estás comiendo".
Incentivelo para que repita palabras a través de canciones.
miércoles, 23 de junio de 2010
Proyecto: Promoción del Desarrollo Comunicativo y Afectivo en Sala Cuna del sector Norte de Santiago
Apoyadas por las profesoras Mariangela Maggiolo y Claudia Arancibia, docentes de la Escuela de Fonoaudiología de la Facultad de Medicina, las alumnas del primer año de la ya mencionada carrera: Marcela Castro, Yanara Espinoza y Camila Fortini realizaron un proyecto de Promoción del desarrollo comunicativo y afectivo en cuidadoras de sala cuna del sector norte de Santiago.

El objetivo principal del proyecto fue que las madres y cuidadoras conocieran la importancia de interactuar con los niños y estimular sus sentidos al máximo durante los primeros meses de vida mediante técnicas simples y fáciles de llevar a cabo. Además se informó acerca de lo trascendental que es el desarrollo adecuado del lenguaje, el cual depende de manera directa del apoyo constante que reciba de los seres más cercanos durante el proceso de maduración. Junto con esto se promocionaron las ventajas que el buen desarrollo del lenguaje les brindaría a sus niños a futuro tales como un mayor rendimiento intelectual y facilidad para establecer lazos afectivos, sociales y comunicativos.
Exterior de la Sala Cuna Sol Naciente, comuna de Recoleta
La promoción de la estimulación temprana se realizó mediante material gráfico: afiches publicitarios y trípticos, y una charla para padres y cuidadores en la cual se entregaron nociones de cómo estimular a los niños de manera fácil y adecuada. Acerca de esta charla profundizaremos en una nueva entrada a futuro.
sábado, 19 de junio de 2010
Proyecto: Educación sobre estimulación temprana del lenguaje a madres adolescentes
Compartiendo con Madres adolescentes: primera charla
martes, 15 de junio de 2010
La Historia de la Fonoaudiología en Chile
viernes, 14 de mayo de 2010
El área infanto-juvenil de la Fonoaudiología
-atención secundaria
-atención terciaria
-educación especial
El campo de acción consiste en:
• Evaluación
• Diagnóstico
• Habilitación y Rehabilitación de personas con dificultades en la comunicación oral o en riesgos de presentarlos
• Prevención de dificultades en la comunicación oral
• Investigación en el área
Fonoaudiología, Pregrado en la Universidad de Chile
Sus académicos realizan investigación, docencia en el pregrado, postítulo y actividades de extensión, incluidas evaluaciones audiométricas a personas de escasos recursos, programas de ayuda a niños con trastornos de lenguaje y apoyo a pacientes neurológicos con dificultades en la comunicación.
Descripción
Carrera dirigida a personas motivadas en la prevención, evaluación y terapias de las alteraciones de la voz, habla, lenguaje y audición.
Campo laboral: Estos profesionales son muy solicitados en todos los servicios de salud, y más aún si se han especializado en pediatría y atención de niños. Las escuelas, centros de diagnóstico infantil también requieren de estos profesionales. Centros de locución y escuelas de teatro y canto, también se presentan como opciones a quienes deseen trabajar con adultos en el uso correcto de la voz. Tratamientos de terapia y rehabilitación por accidentes o enfermedades que comprometan la voz, son responsabilidad directa de los fonoaudiólogos.
El fonoaudiólogo o la fonoaudióloga de la Universidad de Chile es un profesional que comprende tanto el fenómeno de la comunicación humana como los mecanismos de la alimentación y sus dificultades. Su formación se sustenta en sólidos conocimientos en ciencias básicas, lingüística y valores bioéticos. Aplica sus conocimientos en la prevención, promoción, evaluación, diagnóstico y tratamiento de las personas que requieran apoyo fonoaudiológico. Además, es capaz de optimizar y potenciar las habilidades comunicativas en individuos que las necesiten para su desempeño profesional. Todo lo anterior contribuye así a mejorar el bienestar comunicativo de la población.
Asimismo, ejerce su rol con responsabilidad y compromiso, ya sea en forma individual o al interior de equipos de trabajo. Participa en la gestión de centros de salud y educación, así como en servicios de Fonoaudiología en los sectores público y privado. Utiliza estrategias de autogestión para enriquecer su desempeño profesional. En el ámbito de la investigación, es capaz de problematizar situaciones susceptibles de ser investigadas, para abordar desde una perspectiva científica dichas situaciones y así aportar al desarrollo disciplinar y a la calidad de vida de las personas.
Finalmente, su actuar se caracteriza por un claro sentido de responsabilidad social, el cual se manifiesta en todas las instancias de su quehacer profesional.
Grado Académico
Licenciado(a) en Fonoaudiología
Título profesional
Fonoaudiólogo(a)
Facultad o Instituto
Facultad de Medicina
Duración
10 semestres, en régimen diurno y currículum semiflexible
Fonoaudiología: Postgrado y Postítulo en Universidad de Chile
Fonoaudiología, Investigación en la Universidad de Chile
INVESTIGACIÓN
Pese a que la carrera de fonoaudiología no lleva mucho tiempo desarrollándose como tal, se han logrado grandes avances y descubrimientos gracias a las tantas investigaciones realizadas por importantes fonoaudiólogos de Chile. En el área del trastorno de la comunicación en niños y adolescente se han hecho muchas investigaciones que han contribuido al entendimiento del desarrollo verbal y social de los seres humanos en dichas etapas.
Algunas de las investigaciones realizadas por académicos de la Universidad de Chile son: el desarrollo fonológico en niños de 3 a 6 años (por MM Pavés), Dificultades de lenguaje en preescolares (por L Schonhaut, M Maggiolo, Z De Barbieri, P Rojas, A Salgado), entre otros. Además de la escritura de libros como “El desarrollo narrativos en niños” (por MM Pavez, CJ Coloma y M Maggiolo) y test como “Test para la evaluar procesos de simplificación fonológica TEPROSIF-R” (por María Mercedes Pavez, Mariangela Maggiolo y Carmen Julia Coloma) que han sido de gran utilidad para la comprensión y diagnósticos tempranos de distintos tipos de trastornos.
Generalmente, los procesos de investigación formal son desarrollados por profesores, más la colaboración de los estudiantes, quienes participan en calidad de asistentes de investigación. Tanto los productos de la investigación formativa como los de la formal, culminan con la presentación y socialización de un informe final que da cuenta del trabajo desarrollado por los estudiantes. Para todas las universidades este trabajo de investigación es requisito parcial para optar al título de profesional en Fonoaudiología.
De acuerdo a esto, existen diferentes áreas de investigación en la Fonoaudiología, Teniendo:
• La investigación en pregrado o investigación formativa corresponde a los estudios que se exigen como requisito de grado en los programas de formación universitaria. Este requisito de grado es cuestión de autonomía institucional.
• Sólo en un programa de formación, se perfilan los intereses investigativos dentro de líneas específicas de investigación, correspondiente al nivel de investigación formal. El desarrollo de nuevos proyectos de investigación y la continuidad de los mismos, se determina según parámetros de factibilidad administrativa-financiera, junto con criterios de pertinencia y relevancia científica o social.
• Con respecto a las áreas de investigación, se evidenció un mayor interés en estudiar el lenguaje durante los cinco intervalos de tiempo, seguido por un interés creciente en el área de la comunicación, a partir del tercer intervalo. Por su parte el interés por las áreas del habla y la audición, se mantuvo estable a lo largo de todos los períodos en estudio.
• En cuanto a la naturaleza del proceso, se encontró un mayor interés por el estudio de los denominados procesos anormales hasta el cuarto período, donde irrumpe el estudio de los procesos normales.
• Con respecto a la variable población, se encontró una predominancia en el interés de los niños que en los adultos, durante los cuatro primeros períodos, el interés por los adultos se inicia a partir del segundo período.
• En relación con los fines de la investigación, se encontró una predominancia de la investigación básica en el primer período y, luego un decremento paulatino.
• En la variable tipos de investigación, predominó en el primer período trabajos de características documentales, desde el segundo período aparecen con una marcada tendencia las investigaciones nemotécnicas y se reducen las documentales, las investigaciones de carácter ideográficas se presentan en el período cuarto con una alta frecuencia.
Grafico 1. Distribución por áreas de los trabajos de investigación

Gráfico 3. Distribución de los trabajos según procesos terapéuticos
Gráfico 4. Distribución de los trabajos de grado según campo de intervención
http://www.youtube.com/watch?v=SEUK9KmK0kE